21 de octubre de 2011

He de rectificar...

La verdad es que es para mi no es nada agradable escribir lo que voy a decir a continuación, pero temo que una actuación mía (que, por muy buena intención que tuviese al hacerlo, no se si fue la decisión más acertada) pueda llevar a error dentro del funcionamiento del blog. 


He recibido varios mails de personas que me conocen y que siguen el blog pidiéndome que ayude a gente que ellos conocen (y por extensión algunos conozco yo) y, a ver, creé el blog con la única función de acercar un poco las vivencias de gente que normalmente no tenemos en cuenta, contar mis experiencias para de alguna forma, intentar hacer pensar y dejar la puerta abierta a un cambio de mentalidad o una visión un poco más amplia de la vida. 
Cometí el "error", aunque ya digo que fue con toda mi buena intención, de dar una opinión sobre lo que yo haría en el caso que proponía Loli en un comentario, pero jamás imaginé que de dar mi opinión como he hecho muchas veces antes iba a desembocar en recibir correos electrónicos pidiendo apoyo. Espero que comprendáis que me estáis pidiendo que ayude a gente desde mi casa según lo que vosotros sabéis o pensáis y yo no puedo hacer terapias, intervenciones o "salvar" (como algunos decís) a personas que conozcáis, mucho menos vía Internet. Digamos que yo no puedo decirte a ti lo que yo haría para que tú repitas pasos con tu familiar o amigo, piensa que nosotros somos seres dinámicos, tú no controlas lo que la otra persona te va a contestar, y puede desembocar en algún que otro lío.


Después de actuar en el caso que os cuento del chico que quería agredir a mi vecino, digamos que era "joven e inexperta" y quería comerme el mundo, ahora, sigo siendo joven y también inexperta, me quedan muchas cosas en la vida, pero ahí, por muy bueno que fuese el resultado, aprendí los "contra" de intervenir sin una institución o nombre que te respalde, porque si te equivocas, si pasa algo, vas a responder como Diana, una ciudadana sin ningún título más, en cambio, cuando estás trabajando, actúas como Diana, proyecto de Trabajadora Social.


Se que es complicado delimitar donde empieza la profesión y comienza la "simple chica" y tened por seguro que si tengo conocimientos de la zona de la que habláis y de los recursos que existen por ahí puedo guiaros un poco en cuanto a centros que conozca o dar mi opinión, pero no me gustaría que se perdiese la esencia de este espacio y, no me gustaría que pensaseis que voy a "trabajar" con toda persona que encuentro en la calle porque no estoy activa 24h :P 
Estoy enamorada del Trabajo Social, es mi pasión, mi afición, mi trabajo, me encanta y me hace muy feliz, pero también necesito descansar a veces, es PARTE de mi vida, no mi vida entera. Espero que lo entendáis.


Os invito a contar vuestras experiencias, vuestros pensamientos, pero entended que esto es un trabajo de la universidad y que, por mucho que me alegre que queráis ayudar a vuestra familia y amigos, a vuestra gente, no puedo hacer "terapias virtuales", más que nada porque sentiría que haciendo eso estoy "luciéndome yo como Trabajadora Social" y no haciendo el trabajo que pretendía hacer con el blog, acercar éstos dos mundos tan cercanos y, a la vez, tan lejanos.


Espero que lo comprendáis y, gracias a todos ;)

3 comentarios:

  1. No creo que haya un culpable en lo que ha pasado, simplemente las ganas de ayudar se mezclaron con las de conocer a alguien que sabe como hacerlo, me ha gustado como has manejado el asunto y sinceramente, este post me parece una buena muestra de madurez, mucho animo y espero que sigas compartiendo tus experiencias con tus lectores.

    ResponderEliminar
  2. Me sumo al comentario de cuack!
    Y añado que está muy bien que aclares que existe una escisión de tu vida y tu "trabajo", que por mucho que te apasione, hay barreras que no se pueden traspasar.
    Para ser una buena profesional, tienes que tener eso muy claro. Yo creo que vas por buen camino.

    ResponderEliminar